Cuantas veces he escuchado que no se hace pan en casa porque no se ha encontrado la harina adecuada!! O que no se han aclarado en el super con la variedad de harinas y han optado por comprar una barra y asegurarse la jugada!! Pues después de esta receta, siento decir a todos aquellos expertos en buscarse mil excusas, que con una simple harina se puede hacer un pan de los de quedar como auténticos magos panaderos. Hace un par de domingos vinieron a comer unos amigos, hacía un día espectacular, un sol alucinante y una temperatura de esas de estar en el jardín con manga corta, así que pensé que cocinar una paella fuera estaría genial, y mientras se cocinaba puse un par de cosas para picar. Estos panes persas desaparecieron en un abrir y cerrar de ojos! Los acompañé con dos salsas para mojar, un caviar de berenjenas y una salsa tzatziki ( ellos son griegos y tonta de mí no caí hasta que los tuve delante, jajaja, que presión y que estrés , suerte que me dijeron que estaba perfecta que si no....). Hasta mi hija que de todas estas cosas huye como si se tratase de la peste, estuvo enganchada con pegamento extra fuerte a la mesa al lado de los panes vigilando cuanto cogía cada uno para no quedarse sin una miga. El comentario general fue lo maravillosamente crujiente que estaba en su exterior junto con el sabor tan extraordinario que ofrecían las semillas y la jugosidad de su miga. Como siempre, se fueron de casa con un tupper lleno de arroz y la receta del pan para hacerla en su casa. Si es que siempre digo lo mismo, hacer pan en casa es muy fácil, hay que perder el miedo y lanzarse a amasar sin parar. No hay nada más gustoso que meter los dedos en la masa y luego ver esas marcas tan bonitas en el pan al sacarlo del horno. Y os digo otra cosa, si tenéis peques alrededor, es una de las manualidades más gustosas que hay. Es muy probable que si se pasan amasando luego no haya dentadura que pueda mordisquearlo, pero para eso estamos nosotros, les damos un trozo de masa para que se lo pasen pipa y reservamos una pequeña cantidad de panes para que los decoren ellos sin darles tiempo a meter demasiado las zarpas y enseguida meterlos en el horno. Luego es que se comen hasta el papel de horno!
Esta es la de esas recetas que son perfectas para iniciarse en el mundo panil. No hay que preocuparse demasiado si sube mucho o poco, al ser un pan plano el volumen no es importante. En cuanto a los aromáticos podéis decidir vosotros que os gusta más, Ibán utiliza ajenuz ( un semilla típica de Oriente Medio), pero no os agobiéis si no la encontráis, con sésamo y hierbas secas también queda la mar de bueno. No sé si os lo he confesado alguna vez, pero mi mayor sueño es trabajar en un obrador de pan. Es una de las profesiones más agradecidas según mi humilde opinión, con cuatro ingredientes se forma el mejor alimento del mundo mundial. Pero por otra parte estoy segura que cuando llevara dos días levantándome a las tres de la madrugada no estaría tan contenta, jajaja, pero todo requiere su sacrificio. Lo malo es que hoy en día hay pocos obradores abiertos, de esos de hacer pan a diario, cajones de levado, hornos de los buenos...lo que viene siendo un obrador a la antigua usanza. En ocasiones veo reportajes sobre fogones tradicionales y me da una gran envidia ver a esas mujeres que se reunían una vez a la semana para amasar, y hornear juntas, luego aprovechaban el calor del horno para preparar empanadas, hornazos y algún que otro bizcocho, sobaos o magdalenas...se me hace la boca agua jajajaja, mientras cotilleaban , se ponían al día y cantaban canciones...bueno, de ésto último no sé yo si nos pondríamos de acuerdo jajaja, las jotas no me salen muy bien, yo soy más de Beyoncè o Madeleine Peyroux, Emili Sandé, Adele... Si es que yo lo tengo claro, lo que debería hacer es tener una casa rural en cualquiera de esos pueblos semi abandonados y cocinar y preparar todo tipo de panes y dulces para ofrecer grandes desayunos a los comensales. De ilusión también se vive no?? Vendríais?? jajaja!!!
Venga, vamos a dejar de soñar, ya no me queda más que pediros que visitéis a mi querida amiga Paula, seguro que sus panes persas le han quedado a las mil maravillas!
INGREDIENTES
Masa vieja o Madre de levadura
* 125g harina blanca de repostería
* 75g agua
* 1,5g de levadura fresca de panadero ( 0,5g de levadura seca)
Masa
* 200g masa madre de levadura
* 350g harina blanca de repostería
* 150g sémola de trigo duro
* 300-310g agua
Decoración
* 10g sal
* 1 cucharada de harina blanca
* 1 vaso de agua
* sésamo blanco, negro, ajenuz ( nigella sativa o kalonji), hierbas aromáticas secas...
ELABORACIÓN
1. El día anterior mezclar los ingredientes de la masa vieja y forma una bola, colocarla en un bote hermético y dejarla en el frigorífico hasta el día siguiente ( aunque la masa en estas condiciones aguanta en el frigo hasta 4 días). En el caso de no querer esperar tantas horas, podéis dejarla fermentar entre 3-4 horas a temperatura ambiente.
2. Crear la masa: mezclar todos los ingredientes incluida la masa vieja preparada el día anterior. Déjala reposar 5 minutos y amasa plegando la masa sobre si misma y haciéndola rodar por la mesa durante 8-10 minutos hasta conseguir una masa suave y sedosa. Coloca la masa en un bol untado con aceite ligeramente, tapar y dejar levar 1 hora y media.
3. Transcurrido el tiempo dividir la masa en dos piezas iguales, estirarlas hasta formar una lengua de unos 40cm de largo y de 1cm de grosor. Cubrir con un trapo limpio y seco y dejar que fermenten hasta alcanzar unos 2cm de grosor.
4. Mientras preparar el glaseado, disolver la cucharada de harina en el vaso de agua y dejar hervir durante 1 minuto, reservar.
Una vez fermentados los panes, esparce tres o cuatro cucharadas del glaseado en cada uno y con las yemas de los dedos ir haciendo surcos a lo largo de los panes, llegando a tocar la bandeja a través de la masa. Repetir los surcos de forma paralela dejando una separación de un par de centímetros. Esparcir las semillas y hornear a 250°C durante 10 minutos o hasta dorar.
Como merienda con un poco de queso fresco de untar, como acompañamiento a unas brochetas hechas en la barbacoa, mojado en salsas o a palo seco, os puedo asegurar que está la mar de bueno. Que os aproveche!