Después de siete meses sin bajar a casa, por fin llegó el momento. Es curioso que algunos de vosotros estéis pensando en disfrutar de unas fantásticas vacaciones fuera de casa, de la ciudad en la que vivís, cambiar de aires, de país y yo esté deseando ir a ese lugar que abandonáis durante unos días. Que caprichosa es la vida, no siempre estamos contentos con lo que tenemos, siempre buscamos o queremos algo diferente. Puede que nos crucemos en el camino, si es así, espero que disfrutéis muchísimo durante vuestras vacaciones, cuidado en la carretera y sobretodo que preparéis platos extraordinarios y luego podáis compartir con todos nosotros.Yo así lo haré, podré cocinar platos que aquí me resulta francamente difícil pues no siempre encuentro los ingredientes que preciso. Lo dicho, nos vemos a la vuelta. Por cierto, la foto pertenece a un pueblecito llamado Bad Ragaz, famoso por sus hoteles balnearios cinco estrellas y alguna más, lujo asiático en medio de Suiza, y cerca de Chur, el lugar perfecto para coger uno de los trenes panorámicos que te descubren paisajes y montañas impresionantes. Sino tenéis decidido dónde ir éstas vacaciones, aquí os dejo una muestra de el país en el que me encuentro. ¡Buenas Vacaciones a todos!

Aquí una receta más con los productos recogidos en la granja. Es simple, fácil y jugosa como ninguna. Ya lo he mencionada en repetidas ocasiones, que en mi casa el chocolate es vital, y cuando ven un bizcocho con ingredientes diferentes, lo miran de reojo dudando si probar o no, eso sí una vez se deciden se convierte en el pastel de sus vidas,jaja. Espero que lo probéis y aprovechéis que las cerezas están en los mercados en su punto.

Ingredientes
*75g mantequilla
*200gr azúcar
*1 sobre azúcar de vainilla( opcional)
*2 huevos
*200ml yogurt natural
*200gr harina repostería
*un chorrito de Kirsch(opcional)
*1 sobre de levadura
*250gr cerezas
Elaboración
1. Batir la mantequilla y los dos tipos de azúcar hasta obtener una masa cremosa.
2. Unir de uno en uno los huevos a la masa, el yogurt y el licor de cerezas.
3.Tamizar la harina ( pasada por un colador) y unir a la mezcla junto con la levadura.
4. Lavar, secar y deshuesar las cerezas y mezclar con la masa. Para evitar que se hundan durante la cocción, enharinar previamente.
5. Hornear 30 minutos a 180ºC, comprobar con una puntilla la cocción, si sale manchada dejar el bizcocho otros 10 minutos más.
Es un pastel realmente jugoso, suave y si las cerezas son dulces queda realmente bueno, acompañado de un café, entra de maravilla. ¡ Qué aproveche!

Después de ir a las granjas, pasar una buena mañana de campo cogiendo kilos de frutas, llegas a casa y a buscar en el recetario personal, que hacer para acabar con toda la mercancía. Y aquí llega la primera, un brazo de gitano relleno de nata y fresas. Siempre me he preguntado porque llamarlo así, supongo que la forma le ha dado ese nombre, pero lo de gitano, es que sólo ellos tienen brazos, o puede ser por el color mas tostado del bizcocho,jaja, nunca lo he sabido muy bien, pero lo que si sé , es que me encantan, con cualquier relleno. Es bien sencillo de hacer el biscuit, sólo controlar el tiempo de cocción y dar forma al bizcocho antes de que se enfríe para evitar que se nos pueda romper. Espero que os guste y no dudéis en hacerlo, un consejo, relleno de crema de limón, esta para morirse.

Ingredientes para el Biscuit *100g azúcar *4 huevos *1 limón *1 pizca de sal *2 cucharadas de azúcar *90gr harina de repostería Ingredientes para el relleno *2dl nata para montar *250gr fresas *2 1/2 cucharadas de azúcar glass Elaboración 1. En un bol, o en la cubeta de la máquina, batir el azúcar con las dos yemas y la ralladura de limón y batir hasta obtener una crema de color pálido. Unir el zumo de medio limón e integrar en la mezcla. 2. Montar las claras a punto de nieve con la pizca de sal. A medio montar incorporar las dos cucharadas de azúcar y acabar de montar. 3. Con movimientos envolventes incorporar las claras a la crema de yemas. Unir la harina tamizada ( pasada por un colador) e integrar en la mezcla. 4. Sobre una bandeja de horno con papel sulfurizado, extender la mezcla con la ayuda de una espátula y dejarla más o menos de 1 cm de grosor y de manera uniforme. Hornear en la zona central del horno 6 minutos a 220ºC con la puerta ligeramente abierta. Pasado éste tiempo, sacarlo del horno y colocarlo sobre un trapo de cocina limpio, e ir enrollando con la ayuda del trapo y en caliente. Lo dejamos así hasta que enfríe, de ésta manera, le damos forma al bizcocho y luego al enrollar con el relleno no se nos romperá. 5. Montar la nata con el azúcar glass y mezclar con las fresas troceadas. 6.Cubrir 3/4 partes del bizcocho con la nata y las fresas y enrollar, espolvorear con azúcar glass. Guardarlo en la nevera y listo para servir. Después de una buena comida, con un café o té helado, entra de maravilla, y no digo si lo acompañamos de una copita de vino dulce.¡ Qué os aproveche!

Después de un invierno un tanto duro, llega el buen tiempo, se agradecen esos días de sol, y sobretodo salir con los niños y recoger fruta a las granjas. Disfrutamos todos muchísimo, te dejas un poco la espalda después de un ratillo agachada para coger las fresas, pero vale la pena, porque recoges 3kg de fresas y te comes 2kg en el proceso, una a la cesta y otra a la boca.Como dice mi hijo Marc, las fresas más buenas son las calentitas, y con el calorcito que hacía ese día, todas estaban calentitas, si por él fuera nos hubiéramos quedado toda la mañana allí. El sistema de recogida es la mar de sencillo, cada uno se lleva sus tuppers, te los pesan al entrar, te indican a que hilera de campo puedes ir , te llevas un palo contigo y lo vas clavando a medida que vas avanzando, de esa manera la siguiente persona sabe hasta dónde has llegado y se asegura que a partir de ahí seguro que hay fresas. Hay plantas para parar un tren y fresas a montones,con un sabor delicioso, dulces, jugosas... Lo mismo con las cerezas, te atan un cesto a la cintura y a buscar cerezas, tienes hasta escaleras para llegar a las más altas. Mi hija Paula con dos añitos, claro no llegaba muy bien, así que a por las del suelo, y lo contenta que estaba ella, que le habían dado un cestito mini para guardar sus cerezas, tengo a toda una granjera en casa. Y con todas estas frutas tengo una tanda larga de recetas, así que a prepararse y a preparar la impresora, espero que os gusten y disfrutéis tanto como yo preparándolas


El niño de la fila central es Marc, con su gorra y dejándose la espalda, pero disfrutando como el que más.

Y aquí la granja de las cerezas, hasta 12 filas de árboles y árboles repletos de fruta como los de la foto, vamos que no se acaban en varias semanas.

Paseando por cualquier carretera interior de éste país, Suiza, es bastante fácil encontrar terrenos plantados con flores, o cómo éste con Kefen, tirabeques en castellano ( espero no equivocarme en la traducción), para que cada uno se sirva de coger directamente de la planta. Dispones de cajitas de cartón, por si no llevas un tupper, e ir recogiendo directamente de la planta, pagas metiendo el dinero en un bidón debajo del cartel y a tu casa a cocinar cosas tan buenas como éstas cintas con verduras. También puedes coger flores, encuentras tus tijeras podadoras, alambre, e incluso papel para envolverlas, y te presentas en casa con un hermoso ramo con flores frescas y además a tu gusto. La primera vez que mis padres estuvieron aquí después de mudarnos, alucinaron con éste servicio self-service, y alucinaban con la honradez de la gente, porque jamás he encontrado un puesto de éstos destrozado o alguien que no pague. Mi padre bromeaba comentando que si ésto existiera en España, la gente no dejaba ni el cartel, arrasaba con todo y no encontrabas ni la tierra,jaja... la gente es muy amante de lo ajeno. En fin, que lo bueno de todo ésto es que los niños disfrutan como nadie, cogiendo judías, y pasando un rato al aire libre la mar de interesante.
La receta es de lo más simple, pero no por ello menos interesante, completa ya que contiene hidratos de carbono, vitaminas y proteínas gracias al queso. Para los amantes de la pasta, otra receta fácil y con productos fresquitos, recién cogidos de la planta.

Ingredientes

* cintas de pasta de espinacas ( frescas)
* 1 cebolleta
*1 diente de ajo
*3 filetes de anchoas ( opcional)
*15 tomates cherry
*250gr tirabeques
*queso parmesano
* 100gr bacon
*1/2 copa de vino blanco
Elaboración
1. Picar el diente de ajo y la cebolleta, y en una sartén pochar.Unir el bacon troceado. Añadir los filetes de anchoa ( ésto es opcional, es una manera de sazonar y deja un gusto muy especial, se deshacen enseguida por efecto del calor).
2. Añadir los tirabeques previamente lavados,secados y partidos a la mitad. Unir los tomates cherry partidos a la mitad y sazonar. Regar con media copa de vino blanco y dejar reducir.
3. Cocer la pasta siguiendo las instrucciones del fabricante. Unir a la salsa, mezclar y servir inmediatamente. Rallar parmesano al momento sobre la pasta.
También tengo que decir que el día que fuimos a buscar tirabeques calló una lluvia de las que dejan huella, y llegamos de barro hasta las cejas, pero con un hambre considerable, por lo que no sobró ni una cinta de pasta y con la emoción por parte de mis hijos de probar lo que habían cogido con sus propias manos. ¡ Comieron verdura y sin rechistar,jaja!. ¡ Qué os aproveche!

Me encanta hacer pan en casa, eso es un hecho, quién me conoce sabe que poco pan industrial entra en casa, y eso, que aquí en Suiza el pan del supermercado está realmente bueno y dura días. Cuando bajo a España, es una de las cosas que más me desagradan, el pan, lo compras por la mañana y a la hora de comer está chicloso y no sabe a nada. Yo en casa, casi siempre cocino el mismo tipo de pan, pero me encanta probar recetas nuevas, así que siguiendo a la maestra del pan Eva de Ma Petite Boulangerie, probé éste pan de molde. Es una auténtica delicia, tiene una miga espectacular y dura bastante después de hecho. Y lo mejor de todo, natural como la vida misma, sin conservantes ni aditivos y con un olor.... En casa fue todo un éxito, así que ahora es otro fijo de mi recetario de pan .

Ingredientes

*500gr harina blanca de fuerza
*150ml agua
*75ml leche
*10gr mantequilla
*10gr sal
* 1 cucharada de miel ( aportación personal a la receta)
*25gr levadura fresca de panadero
* mantequilla para untar el molde

Elaboración

1. En un bol, mezclar la levadura con una cucharada de harina y otra de azúcar. Mezclar y dejar 10 minutos . En el momento que aparecen burbujas y vemos que aumenta de volumen la tenemos preparada.
2. En la máquina amasadora colocamos, la harina, sal, miel, mantequilla, y la mezcla de la levadura. Vamos añadiendo el líquido, a temperatura ambiente, que nos admita. Eva puso otras cantidades de líquido, 300ml de agua y 50ml de leche, pero en mi caso, no hizo falta tanta cantidad, eso depende mucho de la calidad de la harina, de la humedad que tenga. Amasar por 8 minutos.
3. Sacar del bol y darle forma alargada y colocar sobre un molde de cake ligeramente engrasado. Tapar con un trapo limpio y seco y dejar levar hasta que doble el volumen.
4. Hornear a 210ºC de 40-45 minutos. Si a media cocción se dora en exceso, cubrir con papel de aluminio.

Para desayunar, tostadito o sin tostar, o para cenar como en la foto con unos pimientos escalibados, carne y queso gratinado por encima y quién se resiste... yo no, os lo aseguro.
Gracias Eva, pienso seguir probando más recetas.