Los que habéis pasado por mi cocina virtual, os habréis dado cuenta lo que me gusta el hojaldre. Llevo bastante tiempo haciéndolo yo misma, aprovechando esas largas,oscuras y frías tardes de invierno, me meto en la cocina, y con buena música hago cantidad suficiente para congelar e ir usando. Pero dura muy poco en mi casa, porque a la que tengo invitados o incluso para nosotros, encuentro la excusa perfecta para "colarlo" en los menús. Ya sea una receta salada o dulce, el hojaldre queda de maravilla , así que aprovechando que el pasado jueves fue festivo aquí en Suiza, nos fuimos a un parque cercano, GoldauPark y con nuestros amigos montamos un picnic ( bueno más bien parecía un buffet libre de la cantidad de cosas que llevamos, jaja), y como no, yo llevé ésta coca de recapte de espinacas que estaba de lujo. En ésta ocasión no usé mi hojaldre casero ( hace tiempo que desapareció del congelador), pero con el archi-conocido hojaldre del Lidl, quedó muy bien.



Ingredientes:



* 1 paquete de masa de hojaldre



* 400g espinacas



* 1 cebolla



*1 diente de ajo



* piñones



* pasas



* tomates cherry



*bacon ( opcional)



*sal y pimienta



* 1 huevo ( para pintar)




Elaboración



1. Pelar el ajo y la cebolla y trocear muy pequeño. Pochar en una sartén con tres cucharadas de aceite de oliva. Cortar en tiras finas el bacon y unir a las verduras. ( yo en ésta no pude poner bacon pues nuestros amigos son indios y la ternera prohibida y el cerdo no les gusta mucho)



2. Unir las espinacas bien limpias y secas ( si son congeladas, dejar descongelar y escurrir muy bien para que no suelten agua al saltearlas) y freir con las cebollas. Salpimentar y unir los piñones y las pasas. Dejar enfriar



3. Extender la masa de hojaldre y pinchar el fondo para evitar que suba al hornearse y dejando un marco alrededor de la masa de 1cm sin pinchar.



4. Colocamos el relleno de las espinacas sobre el hojaldre dejando los márgenes sin cubrir y lo adornamos con unas tiras de hojaldre y unos tomatitos cherry. Pintamos con yema batida los márgenes y las tiras de hojaldre. Salamos los tomates y cubrimos con unas gotitas de aceite de oliva.



5. Horneamos en la parte central del horno a 200ºC 20 minutos.





Esta coca aguantó un viaje en coche y un paseo considerable hasta que encontramos una mesa y llegó como la véis, perfecta. No deja de ser unas espinacas a la catalana pero con el crujiente del hojaldre que siempre le da una gracia especial a los platos.